viernes, 17 de agosto de 2007

Distancias en el sofa


Carrie... tras su fracaso con el "hombre perfecto", decidió cambiar el chip en un momento en el que se encontraba sola en casa. Para ello, invitó a un amigo suyo... alto, moreno, mazado, no muy guapa de cara... pero eso, hay veces que no importa demasiado.


En definitiva, lo que hicieron durante toda la noche fue: ver dos películas y programas que echaban hacia las 5 de la mañana... llegaron las 6 de la mañana, y el chico se lanzó, pero Carrie prefirió que se fuese a casa.


¿Qué le ocurre a Carrie?, ¿desde cuándo se pasa la noche viendo la televisión con un chico así?, ¿cambiará?

lunes, 25 de junio de 2007

Sigue rascando... ¡suerte!


¿Creéis que dar con el hombre perfecto es suficiente? Pues no, porque hay veces en la vida que cuando crees encontrarlo ves que efectivamente, no vive a dos pasos de tí, no... sino cuatro pasos más para allí... pongamos a... unos 500 km de distancia. El chaval es absolutamente perfecto: guapo, inteligente, atractivo, cariñoso, atento, adinerado... pero no hay que tentar tanto la suerte, no, no, no... porque en ese pack tan completo existe una característica que le marca al chaval: es gafe (quizá lo soy yo).


El caso es que Carrie un día conoció a través de este mundillo de Internet al chico perfecto, con familia a una hora de su ciudad (éstos además tenían un adosado muy cerca de dónde ella vivía... ¡perfecto!). Pero después de tres intentos... sigue sin conocerle, muy a su pesar. Repasemos lo que ocurrió en cada intento de subir a verla:


1. El perfect-man llegó hasta la ciudad de su familia. El objetivo era venir con los amigos de su primo hasta el adosado que está cerca de Carrie. Pero la noche que iban a subir... salieron, bebieron y estrellaron un coche sin salir de la ciudad. Al día siguiente cuando iban a subir... se murió la abuela del hombre perfecto y tuvo que ir de regreso a su ciudad en vez de ir a ver a Carrie. Muy mala suerte... aunque, hay que decir que el chaval tenía intención de subir con sus amigos, le dejaron colgado y decidió subir él sólo a ver a su familia, por ver a Carrie.


2. El perfect-man esta vez decide no contar con sus amigos desde un principio. Toma camino a la ciudad de su familia, pero se encuentra con atascos... llega muy tarde donde su primo que le esperaba en el peaje para darle la llave del adosado y se quedan dormidos en una estación de servicio. Al día siguiente va al adosado, hace las compras, pero al volver con ellas al adosado... ve que la casa está ocupada con un primo suyo, su mujer y la niña... ¡tiene que buscar una nueva casa! Viaja hasta la ciudad de su primo (una hora y media de camino) porque un amigo suyo le va a dejar otra casa... es el cumpleaños del padre del chaval, y perfect-man se ve en el compromiso de quedarse allí celebrándolo. Y al final, cuando se disponía a ir a recoger a Carrie, llama su madre diciéndole que su mejor amigo está muy mal... vuelta a su ciudad. Carrie, con la maleta hecha desde hace dos días, se ve sola una vez más.


3. "A la tercera va a la vencida"; eso es lo que le decía el perfect-man a Carrie para animarla. El hombre perfecto tenía una boda en la ciudad de sus primos, era la ocasión perfecta para subir a verla. Pero... llegó enfermo, con fiebre y aguantó una boda para nada porque al día siguiente su padre le trajo de vuelta a casa. ¿Por qué? Porque al principio le dijo a su padre que tenía intención de subir para irse de fiesta, y después le explicó que era para ver a una chica, pero no le escuchó hasta que llegó a su ciudad. Su padre se disculpó de mil formas, pero ya era demasiado tarde... Carrie, una vez más, estaba con la maleta hecha, totalmente amargada en su casa.


Cuenta la leyenda que todavía Carrie tiene la maleta hecha por si algún día aparece su perfect-man, pero todo apunta a que la mala suerte le acompañará siempre. ¿Lo conseguirá algún día? Él le ha asegurado que en cuanto se recupere le irá a verla, ¿será verdad? De todas formas, a Carrie le tienen que operar, ¿le dejará verla en tan pésimo estado?

jueves, 21 de junio de 2007

¿Sola o acompañada?


Un viaje, supone un trajín de maletas arriba y abajo, amontonas ropa y accesorios como puedes, encajonas en cada esquina de la maleta el calcetín o el tanga que casi se te olvida llevar, al final te sientas encima y cierras la cremallera a trancas y barrrancas. En ese trajín del que os hablo se trapichea con intimidades, y cuando os hablo de intimidades me refiero, por supuesto, a objetos de uso personal e intrasferibles.

Bien, ¿sabeis lo que es una madre no?ese ser que no puede evitar toquetear y colocar (a su manera) absolutamente todo; y claro ¿cuando ve una maleta llena de cosas no suyas que que va a hacer ese ser? Dejarlo sin más, NO, lo abre y saca... intimidades. Nunca olvidaré aquel momento en que abrí la maleta, y en su interior estaba sólo y abandonado el Mastubator, al aparecer no encontró el lugar adecuado donde colocarlo... A todo esto, ella nunca me habló de mi pequeño compañero de fatigas, creo que aun intenta olvidarse de aquel objeto que fue el único que no supo dónde colocar en toda su vida.

En poco tiempo tendré que volver a viajar, y tengo mis dudas... ¿debería ir sola o acompañada? Vosotras ya me entendéis...

martes, 12 de junio de 2007

Hombres...


Todo es tan complicado cuando se trata de hombres...

Cuando tu pasas de ellos, ellos no hacen más que hacerte toques (a los que no contestas NUNCA, cosa que a mi me parece una señal bastante clara), mandarte mensajitos (que contestas solo para no quedar como una borde), hacerte insunuaciones tontas... y tu ahí, sin hacer ni caso, como quien oye llover. Pero ellos también, como quien oye llover, siguen a lo suyo, insistiendo, que todavía se creen que la mujer que dice que "no" está dicendo "puede ser", y que la que dice que "sí", está diciendo "fóllame-aquí-y-ahora".

Y de repente aparece un tío, que no sabes muy bien porque, te vuelve un poco tonta, y te pones nerviosa cuando coincides con él, y te deprimes cuando no le ves. Y a ese chico pues tú, con tu buena intención, pensando que para que vamos a andar liando la manta si él te gusta, y para que vas a decirle que "no" cuando lo que estás pensando el "fóllame-aquí-y-ahora" (bueno tan poco así exactamente, pero vamos que está más cerca de eso que del "no") pues le dices que te gusta (o igual no se lo dices exactamente así, osea que lo que le dices suena un poco más raro, pero a buen entendedor porcas palabras le hacen falta) así que le dejas todo claro, que él te gusta, que te gusta mucho vamos, y le das tu número y tu DNI si te lo pide, y el pues ni te llama, ni hacer llamaditas perdidas, y sobre todo y mucho más deprimente te das cuenta de que ni siquiera te ha dado su número (de teléfono).

Y piensas que vaya liantes que son los tios, y que desde luego no les gustan las cosas claras.Que quieren oir un "no" o un "tal vez" antes que cualquier otra cosa, y tú que en tu subidón feminista e igualitario te dio por abrir tu corasonsito como si fueras un conquistador de tercera, pues decides que la próxima vas a decir que "no" aunque te estás muriendo de ganas.

lunes, 7 de mayo de 2007

Sonrisas en el recibidor


Samantha era una mujer libre, que le gustaba tratar con los hombres sin complicaciones, y con esto quiero decir, sin compromisos, sin esperar llamadas de telefono ni poner demasiadas ilusiones en una sola persona, al fin y al cabo ¿para qué esperar que un solo hombre le hiciera feliz cuando se puede conseguir esto mismo pero de muchos?

Samantha estaba contenta con su modo de vida y no tenía ninguna intención de cambiar, le gustaba salir por aquí por allá, y si surgía con algún chico que le interesara no tenía ningún reparo en darse el gusto de liarse con él. Pero algo iba a cambiar en Samantha cuando se tubo que mudar a otro piso, no tenía ni idea de lo que iba a significar...

La persona que le atendió en recepción era un hombre joven, muy simpático y amable con ella, y Samantha, sintiéndose un poco sola y desligada del mundo ya que en la vecindad era una desconocida, se sentía realmente agradecida con este hombre. Cada día, él le recibía con una sonrisa y un hola, Samantha ¿qué tal? ( era un saludo de los sinceros, no de los de por decir), y ella le hablaba de su día a día sin reparos y muy agusto; poco a poco empezaron a hacerse buenas migas ente ellos.

Al poco tiempo, surgió salir una noche de fiesta juntos, se les unieron más amigos y terminaron borrachos y bailando, era como si se conocieran de toda la vida. Avanzada la noche una de las amigas se sintió mal y la llevaron a su casa. Como todavía tenían ganas de fiesta decidieron irse a un piso a seguir bebiendo. En el piso se hizo tarde y estaban cansados, había una cama de matrimonio en la que por tonteos terminaron Samantha y ÉL tirados; la situación pilló a Samantha desprevenida, no lo esperaba en absoluto, y de repente, ya con las luces apagadas Samantha se vio rodeada por sus brazos, tras ello comenzaron ligeros y suaves besos en el cuello,unas caricias en la cintura... Ella no podía creerselo, pero no tardó en encontrarse besándole los labios...

La noche se acabó, el reencuentro en el recibidor del bloque de pisos en que se veían a diario era inevitable, a la mañana siguiente le temblaban las piernas al entrar por la puerta, allí estaba ÉL tras el mostrador, el corazon le iba a mil, notaba como se iba sonrojando a cada paso que daba al acercarse al mostrador para coger la llave... Pero ¿qué narices le pasaba?Ella sabía que se había dejado llevar la otra noche, nunca se había sentido tan agusto con un hombre en la cama, pero si simplemente había sido un rollo de una noche como había tenido tantos otros ella antes y él también seguramente, entonces ¿por qué ese quisquilleo en el estómago?¿por qué esa ansiedad que la asaltaba?¿ese miedo repentino de qué pensará de mí?¿qué soy una guarra?¿una suelta?¿un polvo sin más?... Cuando se atrevió a mirarle a la cara ÉL le recibió con una sonrisa en la boca y en los ojos, y le dijo: "Hola Samantha, ¿qué tal?"

martes, 24 de abril de 2007

Dudas y más dudas


El otro día os contamos la historia de amores y desamores de Carrie, y ella tenía una duda. No sabía si esperar a su amor platónico Mr Big o si seguir con el amigo de Mr Big.

Como nadie le sugirió nada, ella pensó en esperar una semanita a Mr Big a ver si él le llamaba para quedar o para charlar. Pero como de costumbre el teléfono de Carrie no sonó. Ella decidió llamarle para ver qué tal estaba, y estuvieron hablando pero Mr Big no quiso quedar porque ya tenía otros planes.

Al día siguiente de esta llamada, el amigo de Mr Big apareció de nuevo en la vida de Carrie, le propuso quedar para tomar algo y ver una peli. Carrie siguió en dudas, y finalmente, defraudada por no poder quedar con Mr Big, le dijo que sí. Quedó con él al día siguiente.

Este amigo, el mismo con el que ha quedado otras veces, es Mr Small, ya que es todo lo contrario a Mr Big. Mr Small es un hombre atento, cariñoso y sincero con Carrie y a ella es lo que le gusta, pero no de cualquier hombre sino de Mr Big.

Ahora no sabe si está haciendo lo correcto o si quedando con el amigo perderá a Mr Big. Hoy mismo Mr Small le ha dicho para volver a quedar. Ella se encuentra en un mar de dudas. Y no sabe si esperando a Mr Big conseguirá definitivamente su amor o simplemente perderá el tiempo otra vez.

lunes, 16 de abril de 2007

Mr Big


La historia de amor y desamor de Carrie comienza el 14 de Febrero del año pasado, cuando se lia por primera vez con Mr Big, el chico que le gusta. Desde entonces ha seguido liándose con él de vez en cuando pero sin tener ninguna relación seria.

Ella siempre le ha tenido en su corazoncito, aunque hay que reconocer que además de tenerle a él también ha tenido a otros muchos.

Ella pensó que era algo significativo liarse por primera vez el día de San Valentín, pero después se dió cuenta que fue simplemente un día que Mr Big no había quedado con su novia. Desde entonces Mr Big ha cambiado de novia cada dos por tres, aunque nunca le pidió salir a Carrie.

El día de noche vieja discutieron porque Carrie harta de que él nunca valorara la relación que tenían y siempre la utilizara como amante decidió liarse con un amigo de Mr Big. Cuando se enteró de que ella se había liado con su amigo se enfadó mucho y desde entonces apenas se habían hablado hasta este fin de semana.

Este viernes se vieron y la llama surgió de nuevo, acabaron en casa de Mr Big, y porsupuesto hablaron del tema. Hay que decir que estos meses en los que no se han hablado Carrie y el amigo de Mr Big han seguido viéndose.

Pero ahora es momento de tomar una decisión, Carrie tiene que decidir entre uno de los dos, sigue sintiendo algo por Mr Big, pero el hecho de saber que nunca le tendrá para ella sola le hace ser dura con él y decantarse por el amigo que le llama todas las semanas para quedar un ratito y es una persona más atenta con ella.

¿Creéis que Carrie tiene que dar otra oportunidad a Mr Big, por si esta vez deja de ser una amante y comienzan una relación seria? o ¿creéis que tiene que seguir liándose con el amigo y también con los que encuentre por el camino?

¿Das señales?

Miranda es la cínica de las amigas y a pesar de que trata de entender a los hombres los ve a todos como unos golfos y unos capullos; todos lo son, pero sólo lo ejercen los que pueden.

Una noche salió de fiesta con sus amigas, como de costumbre, y entonces fue cuando vio a un chico que siempre le pareció que estaba bueno. No le conocía de nada, sólo de vista, pero ya se sabe que el alcohol afecta mucho y Miranda se atrevió a acercarse a él. Y vaya, salió bien la jugada puesto que se liaron. Pero entonces ella se dio cuenta de que había perdido a sus amigas.


El chico la estuvo acompañando por toda la discoteca y estuvo esperando con ella para después acompañarla hasta casa (y eso que ella le dijo que se podía ir con sus amigos tranquilamente). Entonces le pidió el número de móvil a Miranda y ella no se lo quería dar porque estaba convencida de que no le llamaría (no tenía pinta de ser un chico muy desesperado). Es más, le dijo claramente que creía que todos eran unos cabrones y que para qué quería su número si no la iba a llamar.


¿Cuál fue la sorpresa para Miranda? Que nada más meterse en la cama para dormir comenzó a sonarle el móvil. Era él, un sms, diciéndole muy simpático: que había estado muy bien con ella, que la llamaría, que durmiese bien y asegurándole que no iba a ser un cabrón con ella... y para terminar, escribió "un beso tontita". Miranda vio que un poco "tontita" si que fue después de haberle estado diciendo que todos eran unos cabrones y demás.


Los próximos días el chico le mandó algún que otro sms y la llamó para quedar. Finalmente, quedarán. ¿Qué pasará con Miranda? ¿Cómo será él?

El chico animadora

Charlotte recuerda a veces aquella noche de carnaval.

Ella y sus amigas se lo habían pasado muy bien, habían estado toda la noche de fiesta bailando y bebiendo, como siempre.

Cuando cerraron la discoteca Charlotte estaba agotada, llevaba unos zapatos que no eran suyos y tenía los pies destrozados así que de camino a casa, se los quitó y caminó descalza.

Entonces un chico apareció y empezó a hablar con ella. A Charlotte le pareció monísimo, era rubio, e iba disfrazado de animadora, con pompones y todo. Él (le llamaremos chico-animadora para entendernos) alucinó un poco cuando la vio descalza (se nota que nunca ha llevado tacones) y cuando Charlotte le explicó le dolían muchísimo los pies el chico-animadora se ofreció a llevarla a reconcón, Charlotte al principio se reía y decía que no y jajaja que no hace falta y tal y cual, pero al final dejó de hacerse la dura y se subió a su espalda.

El chico-animadora la llevó hasta la puerta de su casa. Y aunque el chico-animadora le gustó desde el principio, a ella le pareció tan bonito todo y tan simpático él que, aunque él se le lanzó un poquito (tampoco puso mucho empeño, todo hay que decirlo) decidió que no quería liarse con él, que lo de ellos dos si surgía debía ser una auténtica historia de amor (bueno, en realidad Charlotte, no pensó tan profundamente en eso de la historia de amor, pero sabía que no quería hacerlo estando medio borracha y simplemente por liarse con alguien).

Y en fin, que Charlotte piensa de vez en cuando en el chico-animadora, y después de tanto tiempo sin verle, una noche hace muy poco, Charlotte cree que le vio, no está muy segura de si era él, y aunque no hablaron apenas, a ella le encantó volver a verle.

sábado, 14 de abril de 2007

Nuevas protagonistas

El blog nació hace poco pero debido al aumento de usuarias meteremos nuevas protagonistas que contarán sus historias. Si antes sólo utilizábamos a Samantha, ahora también estarán las demás mujeres de Sexo en Nueva York.

Las que vayan a escribir aquí y los que vayan a leer el blog tienen que saber que: Samantha contará historias relacionadas con sexo ya que es la devora hombres y le gusta más el sexo que a un niño una piruleta; Carrie será la que cuente historias de borracheras, problemas sentimentales; Charlotte, será el contrapunto de Samantha porque es una romántica sin solución y será la que nos recuerde, de vez en cuando, que hoy en día todavía existe el amor; y Miranda, la cínica, será la que ponga en duda su existencia y la que trate de entender a los hombres.

¿Por qué todo esto de los nombres de Sexo en Nueva York? Porque queremos demostrar que en la realidad ocurren cosas que pasan en esa serie, porque esa serie es nuestra Biblia, porque queremos dejar patente cómo es el amor y el sexo en el siglo XXI y sobre todo, demostrar que el sexo débil ya no somos nosotras.

Agárrame

Esta historia le ocurrió a Samantha hace mucho mucho tiempo, en un lugar muy muy lejano con alguien que no volvió a ver después de las cosas que le pasaron.
Hoy hablando de que cada vez hay más chicas a las que les cuesta agarrar de la mano a un chico, como por ejemplo Samantha se acordó de cómo aquel chico del que hablaba al principio le pidió que le agarrara de la polla y anduviese por el pasillo agarrándole de ahí.

¡Qué cosas le ocurren a Samantha! Pero seguro que a tí también, ¿o no? (o no tan raras).

viernes, 13 de abril de 2007

Salmones y elefantes

Samantha volvió a quedar esta semana con aquél viejo amigo del que hablamos el otro día, bueno, con él y con Carlitos. Esta vez su amigo le sorprendió con unos documentales de naturaleza.

Samantha odia los documentales de naturaleza, pero por más que se lo decía a su amigo él seguía insistiendo en que son muy productivos. Ella sigue sin entender cómo puedes concentrarte en el sexo mientras estás viendo en la tele salmones nadando, o elefantes buscando agua.

Tras ver los documentales con su amigo e intentar concentrarse en lo que él le propuso pudo difrutar mejor del sexo, aún y todo, Samantha no cree que viendo los documentales sea una buena forma de tener relaciones sexuales.

Cree que es imposible concentrarte en esas dos cosas a la vez. Si alguien que entre en este blog ha disfrutado de experiencias similares a esta o a las demás que hemos comentado a Samantha le gustaría mucho que escribieran cómo las han vivido, para así poder disfrutar todos de estas experiencias y poder probarlas.

Después de haber contado esta historia de Samantha, cuál creéis que será la siguiente que le ocurra a Samantha?

martes, 10 de abril de 2007

Virgen María


La historia que toca esta vez es la historia de las historias, o mejor dicho, el comienzo de todas las historias ya que trata de la vez que perdió la virginidad. Pero no me extenderé mucho para contar la anécdota que ella recuerda especialmente.

El que era novio suyo por aquel entonces se tuvo que quedar a dormir en casa de Samantha, no hubo más remedio. Pero su madre, inteligente ella... sabía como era el espíritu de Samantha, conocía muy bien a su hija y se adelantó a sus intenciones. Así, antes de que Samantha se fuese a dormir, la paró en el pasillo y le dijo: "Ni se te ocurra meterte en su cuarto". ¿Pero qué pasó? Que Samantha visitó el cuarto y el personaje de este Blog comenzó... ¿Qué sería de Internet si no existiese Samantha?

Gracias por asegurarnos tantas anécdotas sexuales desde aquel día.

Carlitos

La siguiente historia de Samantha ocurre un jueves a la mañana cuando queda con un viejo amigo para desayunar en su casa. Todos podemos imaginar lo que ocurrió tras el desayuno que prepararon en casa de ese amigo.

Como de costumbre después de desayunar se acostaron juntos y luego se quedaron en la cama charlando y viendo las noticias, cuando de repente su amigo se puso a gritar "CARLITOS!!". Samantha sorprendida se incorporó de golpe y cuando miró a su amigó se dió cuenta de que Carlitos era el nombre que había puesto a su polla. Entonces su amigo le dijo, "es que Carlitos se ha puesto a escupir solo, sin yo hacerle nada".

Samantha impresionada por lo que había ocurrido se echó a reír y continuó viendo las noticias como si nada hubiera ocurrido.

Así comenzó el día de Samantha, pero cómo acabará?

lunes, 2 de abril de 2007

Esposada

El blog comienza... historias de amores, desamores, sexo... y más sexo, de un grupo de amigas. Esperamos que esto sea una nueva forma para entretenernos, reírnos y guardar las historias que nos solemos contar delante de un café, aquí, en este pequeño espacio de un mundo tan grande como Internet. Sin más preámbulos... pase adelante!

Samantha comenzó la noche del sábado 24 de marzo junto a dos de sus amigas. Una de ellas iba a recibir una visita que iba a ser esperada... pero para Samantha, fue una visita inesperada.


¿Con qué empieza la fiesta para Samantha? Con una buena dosis de alcohol... las risas no se hicieron esperar para las tres amigas y para el invitado, que por cierto, era el hermano de la pareja de una de ellas.


Todos juntos, los dos hermanos y las amigas, marcharon a otro bar, a seguir bebiendo. Samantha comenzó a estar muy afectada por los efectos del alcohol... tanto que las lagunas comenzaron en ese bar hasta la discoteca que fueron después. Samantha me quiso dar detalles de lo que hizo con la nueva visita exactamente, pero tiene vagos recuerdos de todo.


Al parecer todo comenzó en un bar, siguió en la discoteca... y después en casa del invitado. La noche era muy divertida y las risas siguieron en la habitación... las risas se mezclaron con las sábanas pero recibieron una nueva compañía... unas esposas de peluche rosa junto con una porra. Samantha no se lo podía creer, nunca le había pasado algo parecido... al principio se mostró sorprendida, pero seguidamente, los efectos del alcohol le hicieron caer en un mar de carcajadas.


Lo próximo que me contó Samantha fue que se despertó por la mañana, era tarde, ya le habían llamado varias veces por teléfono y el invitado le llevó, humildemente en moto, puesto que su BMW no lo tenía consigo.


Lo que a la noche eran risas y alcohol, a la mañana siguiente fueron preocupaciones y lluvia... camino a casa.


¿Cuál será la próxima historia para leer?