lunes, 2 de abril de 2007

Esposada

El blog comienza... historias de amores, desamores, sexo... y más sexo, de un grupo de amigas. Esperamos que esto sea una nueva forma para entretenernos, reírnos y guardar las historias que nos solemos contar delante de un café, aquí, en este pequeño espacio de un mundo tan grande como Internet. Sin más preámbulos... pase adelante!

Samantha comenzó la noche del sábado 24 de marzo junto a dos de sus amigas. Una de ellas iba a recibir una visita que iba a ser esperada... pero para Samantha, fue una visita inesperada.


¿Con qué empieza la fiesta para Samantha? Con una buena dosis de alcohol... las risas no se hicieron esperar para las tres amigas y para el invitado, que por cierto, era el hermano de la pareja de una de ellas.


Todos juntos, los dos hermanos y las amigas, marcharon a otro bar, a seguir bebiendo. Samantha comenzó a estar muy afectada por los efectos del alcohol... tanto que las lagunas comenzaron en ese bar hasta la discoteca que fueron después. Samantha me quiso dar detalles de lo que hizo con la nueva visita exactamente, pero tiene vagos recuerdos de todo.


Al parecer todo comenzó en un bar, siguió en la discoteca... y después en casa del invitado. La noche era muy divertida y las risas siguieron en la habitación... las risas se mezclaron con las sábanas pero recibieron una nueva compañía... unas esposas de peluche rosa junto con una porra. Samantha no se lo podía creer, nunca le había pasado algo parecido... al principio se mostró sorprendida, pero seguidamente, los efectos del alcohol le hicieron caer en un mar de carcajadas.


Lo próximo que me contó Samantha fue que se despertó por la mañana, era tarde, ya le habían llamado varias veces por teléfono y el invitado le llevó, humildemente en moto, puesto que su BMW no lo tenía consigo.


Lo que a la noche eran risas y alcohol, a la mañana siguiente fueron preocupaciones y lluvia... camino a casa.


¿Cuál será la próxima historia para leer?

No hay comentarios: